El éxito de una empresa está estrechamente ligado a la dedicación y la productividad de sus empleados. Y uno de los factores que más influyen en el compromiso y la motivación de la plantilla es un programa de beneficios completo y bien diseñado.
La guía definitiva para diseñar un buen programa de beneficios
Si tenemos en cuenta el grado de competitividad que existe hoy en día en el mercado laboral, resulta imprescindible buscar opciones para destacar. Con un programa de beneficios interesante para los empleados, atraerás a los mejores profesionales, aumentarás la retención del personal y cuidarás el bienestar general de tu equipo. En este artículo hemos elaborado una guía paso a paso para que te resulte de lo más sencillo diseñar o renovar tu programa de beneficios. ¡A por ello!
¿Qué es un programa de beneficios para empleados?
Podríamos decir que se trata de cualquier prestación, recompensa o ayuda que una empresa ofrece a su plantilla. Aunque al hablar de beneficios para empleados muchas veces pensamos en el plus para el transporte o en el seguro médico privado, una empresa puede ofrecer muchos otros beneficios a su personal, como el acceso a gimnasios, una guardería en el lugar de trabajo o un plus para que los empleados que teletrabajen instalen una oficina en casa.
Estos son algunos de los beneficios que puedes ofrecer a tus empleados:
- Ampliación de la baja por maternidad
- Ampliación de la baja por paternidad
- Ayudas para tratamientos de fertilidad y programas de planificación familiar
- Opciones para teletrabajar o disfrutar de un modelo de trabajo híbrido
- Un plan de pensiones
- Actividades de fitness
- Y muchas opciones más
¿Por qué son tan importantes los beneficios para empleados?
Los beneficios para empleados ayudan a crear una cultura de trabajo positiva y a aumentar la productividad, al tiempo que demuestran que la empresa se preocupa por su plantilla.
Se acabaron los horarios de trabajo estrictos y la obligatoriedad de fichar al empezar y al terminar la jornada: ahora que la generación Z y los millennials dominan el mundo laboral, la cultura del trabajo está cambiando. Y es que, a la hora de buscar empleo, muchos no solo tienen en cuenta el salario, sino también otros factores, incluidos unos beneficios atractivos.
Cómo diseñar un programa de beneficios que dé buenos resultados
Ahora que hemos descrito el panorama general, vamos a explicarte cómo puedes crear un programa de beneficios que enamorará tanto a tus empleados actuales como a los futuros candidatos.
Paso 1: Escoge unos beneficios que se ajusten a los valores de tu empresa
El bienestar de los empleados es indispensable en una buena cultura corporativa. Por ese motivo, los programas de bienestar deben fomentar la cultura, la ética y la misión de tu empresa y estar en sintonía con ellas. Cuando reflexiones sobre las iniciativas de bienestar corporativo que existen en tu empresa o que planeas incorporar, hazte las siguientes preguntas:
- ¿Los beneficios que ofreces o planeas ofrecer ayudan a los empleados a cumplir la principal misión de la empresa?
- ¿Representan la visión o los valores del equipo directivo en el ámbito del bienestar?
- ¿Los empleados saben que al equipo directivo le interesa cuidar su bienestar y tener una buena cultura empresarial?
- ¿Los empleados relacionarán la finalidad de tu programa de bienestar corporativo con la cultura de la empresa?
Consejo: Crea un mensaje que hable de tu misión y utilízalo en tus iniciativas de bienestar. Es importante que la idea le quede clara a la plantilla, ya que servirá para destacar la finalidad, los objetivos y los valores del programa tanto entre el equipo directivo como entre los empleados.
Paso 2: Descubre cuáles son las necesidades específicas de tus empleados
Un programa de beneficios para empleados no debe estar orientado únicamente a una parte de la plantilla: todos los empleados deberían poder sacarle partido. Aunque intentar alcanzar ese nivel de inclusión puede abrumar un poco, hay varios trucos para garantizar que tu organización ofrezca beneficios de bienestar que se ajusten a las necesidades de todo el mundo.
Para empezar, debes tener en cuenta el perfil demográfico de tus empleados. Tu plantilla estará compuesta por personas de diferentes identidades de género, generaciones y culturas, cada una con sus problemas y sus expectativas, tanto personales como profesionales. Por poner un ejemplo, lo que busca en un programa de bienestar la chica millennial que trabaja en la sexta planta probablemente será muy distinto de lo que le interesa al hombre de cincuenta y pico años que trabaja en el segundo piso del edificio. Aunque existen infinidad de programas aplicables a personas de cualquier edad, independientemente de sus experiencias y su origen, conocer el perfil demográfico de tus empleados te dará información sobre las cuestiones que les preocupan en el ámbito de la salud y sobre sus prioridades. Si conoces a tus empleados y sabes qué es lo que más valoran, no te costará invertir en los mejores beneficios que les puedas ofrecer.
Una vez hecho eso, será el momento de hablar directamente con tu plantilla. Dedica el tiempo que haga falta a conocer los distintos grupos demográficos de tu organización y hazles las preguntas necesarias para descubrir exactamente cuáles son sus intereses, necesidades y preocupaciones.
Por último, establece la rutina de encuestar a tus empleados y a los candidatos que quieran incorporarse a tu empresa para conocer su experiencia con los programas que ofreces y saber qué les gustaría que incluyesen o qué recursos no les interesan. Cuando les pidas su opinión, no olvides definir distintos parámetros para medir la participación y saber si ese feedback se está traduciendo en un compromiso real.
Paso 3: Elige la combinación perfecta de beneficios
Aunque hay muchas opciones para conformar un programa de beneficios para empleados, los mejores beneficios son los que se adaptan a tu empresa y ofrecen flexibilidad. Algunos ejemplos:
- Seguro médico: Un seguro privado que cubra la atención médica, odontológica y oftalmológica de los empleados y su núcleo familiar.
- Días libres extra: La posibilidad de disfrutar de más días de vacaciones, baja por enfermedad o asuntos propios para que los empleados tengan tiempo de descansar, relajarse y ocuparse de cuestiones personales.
- Modelo de trabajo flexible: Opciones para teletrabajar, horarios flexibles o jornadas reducidas para que los empleados puedan conciliar el trabajo con la vida personal.
- Desarrollo profesional: Programas de formación, talleres y oportunidades de aprendizaje para que los empleados puedan mejorar sus habilidades y avanzar en su carrera profesional.
- Reconocimiento y recompensas: Programas que reconozcan y recompensen los logros y el rendimiento de empleados.
- Cuidado de la salud mental: Recursos y servicios para cuidar la salud mental, incluidos programas de gestión del estrés y asesoramiento.
- Programas de bienestar: Iniciativas que fomenten el bienestar, como el acceso a gimnasios, clases de fitness o chequeos médicos.
Para decidir qué beneficios ofrecerles a tus empleados, tienes que comprender sus necesidades y reflexionar sobre ellas, y también sobre los estándares de la industria, las limitaciones en términos de presupuesto y los requisitos legales.
Paso 4: Da a conocer tu programa de beneficios
Por muy bueno que sea tu programa de beneficios, no servirá de nada si tus empleados no lo conocen. Cada vez que amplíes la oferta, no olvides informar a tu equipo de las novedades y recordarles de vez en cuando las opciones que tienen a su disposición.
Para empezar, coge la costumbre de enviar a toda la plantilla un boletín de noticias periódico con novedades e información útil. Si ya lo haces, ¡mucho mejor! Incluye en el boletín una sección sobre tu programa de bienestar que destaque distintos puntos o cuente la experiencia de diferentes empleados de la empresa. Si no tienes un boletín corporativo, tu nuevo programa de bienestar será la excusa perfecta para crearlo.
Consejo: Recurre al lenguaje emocional en tus mensajes e incluye historias personales de empleados que se hayan beneficiado del programa.
Mantén un contacto frecuente con tus empleados por medio de los canales que más utilicen y entiendan. Folletos en la oficina, campañas en redes sociales, webinarios con rondas de preguntas, eventos presenciales... Lo ideal es que des con la combinación perfecta de canales para dar a conocer tu programa de beneficios.
Un programa de beneficios para empleados es una forma fantástica de invertir en tu plantilla y de fomentar una buena cultura del bienestar. Si te mantienes fiel a tus valores y cuidas el vínculo con tus empleados, los beneficios de tu programa serán un pilar para tu equipo durante muchos años.